Calendario diario

Marcadores ofrecidos por marcadores.com

martes, 5 de agosto de 2014

EMB Recuerdos de la Liga. "Cracks de la temporada 94-95"

Davor Suker. El mago de Osijek.

En esta edición de nuestro entrañable repaso por las colecciones de nuestra infancia, hablaremos de un jugador excepcional que tuvo escasa suerte en cuanto a títulos se refiere. Digo esto porque ciertos detalles y acontecimientos impidieron que pasara a la historia del fútbol como una auténtica leyenda, aunque el término "crack" no se lo arrebata nadie. 


En sus inicios jugaba en su ciudad natal, Osijek, pero muy pronto llamó la atención del Dinamo de Zagreb, con el que antoría 34 goles en 60 partidos jugados.  Por ese entonces se trataba de un jugador interesante para los ojeadores, pero al que aun le faltaba mucho recorrido para jugar en la élite. En sus tres temporadas en Zagreb no consiguió alzarse con ningún título, pero aun así terminaría abandonando Yugoslavia (por ese entonces en proceso bélico) rumbo a Sevilla. 


Tras temporadas magnificas con el equipo hispalense, donde demostró calidad de sobra para jugar en un grande, el Real Madrid acabaría haciéndose con sus servicios. El equipo presidido por aquel entonces por Lorenzo Sanz, encaraba un proceso de reestructuración cuyo principal objetivo era volver a ser fuerte en Europa y obtener la tan ansiada séptima Copa de Europa. Davor Suker fue uno de los elegidos para la gloria. Su sequía de títulos acabaría de súbito al llegar a la “Casa Blanca”. Allí obtuvo una Liga, Una Supercopa de España y su título más recordado, La Copa de Europa de 1998, la cual, todo hay que decirlo, no estuvo exenta de polémica.


Polémica aparte, su sobrada calidad le hizo justo merecedor de los títulos. Tras años infructuosos por fin alcanzó uno de los logros que más ansían los futbolistas de élite, coronarse como rey de Europa. 

Pero las victorias no acabarían ahí. Su actuación con Croacia en el mundial de 1998  fue sublime, y a día de hoy sigue siendo uno de los mejores recuerdos de las citas mundialistas. Hay que recordar que era la primera participación de Croacia en una fase final de un mundial, y lo cierto es que el apelativo de equipo relevación se le quedó corto muy pronto. Suker lideraba una generación prodigiosa, acompañado de jugadores de calidad intachable, como Robert Jarni, Prosinecki, Boban o Mario Stanic. En la fase de grupos, Suker sería vital marcando dos tantos importantes ante Jamaica y Japón, que la clasificaban automáticamente para octavos. La derrota frente a Argentina por la mínima no supuso una herida grave para el espíritu de los croatas. En octavos, la selección balcánica se deshizo con apuros de la Rumania de Hagi, Popescu, entre otros, gracias a un penalti ejecutado por Sukerman (uno de sus múltiples apodos). Sin embargo, la mayor sorpresa que desató la euforia en las calles de Croacia, fue la apabullante victoria por 0 - 3, frente a la vigente campeona de Europa, la Alemania liderada por Jurgen Klinsmann, Markus Babbel etc. Fue una victoria increíble que atemorizó a la selección anfitriona en el partido de semifinales. Otra vez Suker traería el nerviosismo a los franceses con otra imparable acción, pero un doblete de Thuram acabaría con el sueño de los debutantes. Croacia terminó ese mundial tercera tras doblegar a Holanda en el partido por el tercer y cuarto puesto. Pese a la derrota ante Francia, la selección croata sentó las bases para los años venideros y Suker, en su mejor año, se confirmó como el máximo goleador de la cita con 6 tantos.


El de Osijek alcanzó su máximo nivel con 30 años y acabaría colgando las botas en tierras germanas, en el Munich 1860. En la actualidad, Suker es el Presidente de la Federación de Futbol de su país, y continúa impulsando a las nuevas generaciones a alcanzar logros aun mayores del alcanzado por él en Francia 98.

 Riddler


No hay comentarios:

Publicar un comentario